La semana pasada pude ver 2012, la película de Roland Emmerich (Godzilla, The Day After Tomorrow, Independence Day). Contrario a lo que muchos suponíamos, el calendario maya apenas se menciona (tampoco mencionan otras profecías que hacen referencia a esa fecha: 21 de diciembre del 2012). La trama se enfoca en la lucha de un hombre por salvar a su familia y llevarlas a los gigantescos barcos (arcas) que se construyeron para salvar sólo a algunos pocos que pudieron pagar los 1000 millones de Euros que costaban los asientos.
En el años 2009 un científico hindú descubre que el centro de la Tierra se está calentando de manera alarmante debido a que debido a las explosiones solares han emitido una cantidad inusual de neutrinos (partículas subatómicas de masa ínfima y carga neutra). Estos neutrinos al atravesar la Tierra han creado un efecto microondas que calentaron el nucleo terrestre lo que ocasiona que las placas tectónicas se muevan. Para salvar a la humanidad se contruyen gigantescas naves en china las cuales se financian con la venta de los asientos y en las que también se llevan obras de arte, animales, etc.
Como toda película gringa, el protagonista (John Cusak) y su familia se libran por suerte o astucia de situaciones de peligro extremo y logra su cometido. Si me preguntan si la recomendaría, pues sí, es una película para entretener.
Cuando ocurra el fin del mundo quiero estar celebrando y cantando: It's the end of the world as we know it..!!! And I feel fine carajo!!!!!
sábado, 21 de noviembre de 2009
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